Un tributo a Nueva York y a la relojería vanguardista
En el año de 1997, URWERK salió a la luz con mil obstáculos frente a sí. En ese entonces, dos jóvenes veinteañeros, Felix Baumgartner relojero y Martin Frei diseñador, soñaban con revolucionar la relojería suiza clásica inmersos en las calles de Nueva York, y aunque tuvieron éxito con sus primeros lanzamientos, la incipiente casa relojera no se capitalizó rápido. Veinte años más tarde, los mismos rascacielos, las congestionadas avenidas y el peculiar ambiente neoyorkino, vuelven a ser la inspiración de este par aventureros visionarios, pero ahora firmes en la industria relojera de nicho. Este 2017 celebran su aniversario con una nueva creación: UR-105 CT Streamliner.
UR-105 CT Streamliner a primera instancia luce es futurista, sin embargo, sus geométricos trazos y simetría remiten líneas Art Déco y a la arquitectura de la ciudad estadounidense de Nueva York.
La carátula, por llamarle de alguna forma al interesante rostro de esta pieza, es una cúpula que se levanta revelando el mecanismo –domo que nos remite a la capota de un auto superdeportivo–. Este movimiento, Calibre UR 5.03, es mecánico automático de 52 joyas, gobernado por turbinas gemelas, cuya precisión es de 4Hz y tiene reserva de marcha de 48 horas.
El mecanismo de este calibre funciona en forma de carrusel con cuatro satélites (muy al estilo URWERK). Cada uno de ellos posee tres numerales que marcan las horas y estos a su vez señalan los minutos en una cuenta retrógrada. Por su parte, el segundero es de tecnología digital de excelente precisión. Sabemos que la explicación suena complicada, pero leer el tiempo en un reloj URWERK es muy sencillo y emocionante.
El UR-105 CT Streamliner se puede elegir en en dos versiones: en deportivo titanio con acero pulido o en elegante acero con recubrimiento PVD negro. Estas ediciones limitadas tienen un precio de aproximadamente $1,300,000.00 pesos mexicanos. Hay que verlo para creerlo.
Añadir comentario