Jean-Claude Biver es uno de esos hombres excepcionales que realmente ha dejado su huella en la relojería suiza. Nació en Luxemburgo el 20 de septiembre de 1949 y se trasladó con su familia a Suiza cuando tenía 10 años. Asistió al Collège de Morges, obtuvo su certificado Maturité en la Escuela de Negocios de Lausana, y completó sus estudios en la Universidad de Lausana. Tras diplomarse en la HEC (Escuela de Altos Estudios Comerciales) de Lausana, se instaló en Le Brassus. Los años que pasó en el Valle de Joux, la cuna de la alta relojería, tuvieron un impacto decisivo en su carrera. Se estableció en las cercanías de una granja, la cual años más tarde se convertiría en la sede principal de Blancpain.

En la mayor parte de este artículo hablaremos de la biografía de Jean-Claude Biver desde la perspectiva de Hublot.

Jean-Claude Biver

Aprovechó la oportunidad única de pasar un año de formación «global» que le ofreció Audemars Piguet en 1975, para luego concentrase en las ventas y el marketing. Durante ese año, se adentró en todos los aspectos de la industria, lo que le permitió adquirir un profundo conocimiento del arte de la relojería. Así fue como desarrolló su pasión por la relojería y los relojeros. En 1980, dejó Audemars Piguet para trabajar en Omega como gerente de productos de oro. Este cargo le permitió conocer las reglas y las limitaciones que implica trabajar para una gran marca internacional. En 1982, motivado por su nostalgia por la cultura relojera del Valle de Joux, adquirió junto con su amigo Jacques Piguet el nombre Blancpain, que había estado inactivo desde 1961.

Con el eslogan «Desde 1735, nunca ha existido un Blancpain de cuarzo. Y nunca existirá», no tardó en revivir la compañía y aumentar su facturación a 50 millones de francos suizos. En tan solo unos años, la marca estaba en competencia con los más grandes nombres de la relojería. Sin embargo, en 1992 decidió vender Blancpain al SMH Group (que luego se convertiría en el Swatch Group) y unirse al equipo de gestión de Nicolas G. Hayek. Como miembro del Comité de Gestión del Swatch Group, le fue asignada la tarea de desarrollar marketing y productos para la marca Omega, empresa en la que había trabajado 10 años antes. El resurgimiento de Omega fue realmente impresionante, concentrándose principalmente en desarrollar nuevos productos y reclutar personalidades famosas como Cindy Crawford, Michael Schumacher, James Bond –alias 007– y Pierce Brosnan.

A finales de 2003, decidió tomarse un año sabático, pero incapaz de permanecer inactivo, cambió de idea y decidió tomar las riendas de una pequeña empresa fundada en 1980: Hublot Ginebra. En 2004, como CEO, decidió enfocarse en el producto original de Hublot y desarrollar un nuevo concepto para la marca: «El Arte de la Fusión». De hecho, en 1980, Hublot fue el primer relojero en crear un reloj que fusionaba diferentes materiales al combinar el oro y el caucho. Dedicando toda su experiencia y talento para el marketing a la marca, en tan solo un año, en abril de 2005, logró la hazaña de lanzar un cronógrafo revolucionario: el Big Bang. El reloj fue presentado en la Feria de Basilea BaselWorld 2005 y tuvo un éxito inmediato.

Los premios se sucedieron con gran rapidez. Hublot recibió una inyección de extraordinario dinamismo, garantizando un crecimiento excepcional. Jean-Claude Biver es realmente el responsable del renacimiento de la marca, y tal vez incluso de su nacimiento, tomando en cuenta el camino que hasta hoy, en 2012, ha recorrido en tan solo 12 años. La empresa debe su impresionante crecimiento a la energía inagotable de su propietario: en primer lugar, el crecimiento económico de la empresa, con un aumento de facturación en cuatro años de 25 millones a más de 200 millones de francos suizos en 2008, cuando la marca fue adquirida por LVMH.

Pero también ha habido crecimiento físico, con la inauguración en noviembre de 2009 de una nueva manufactura de alta tecnología a orillas del lago Lemán en Nyon, evento al que asistió Bernard Arnault. Bajo el liderazgo de Jean-Claude Biver, se han dedicado 6.000 m² al arte de la relojería, a la creación y a la producción de movimientos como el UNICO, un cronógrafo con rueda de pilares, y grandes complicaciones relojeras como el tourbillon, la repetición de minutos de catedral, el movimiento Antikythera, el movimiento Key of Time, y el MP-05 LaFerrari, poseedor del récord mundial con 50 días de reserva de marcha.

Con el fin de mantener a Hublot en la vanguardia de la investigación sobre nuevos materiales de alta tecnología y preservar su experiencia puntera, Jean-Claude Biver instaló una fundición para producir el oro Magic, un oro de 18 quilates resistente a los arañazos lanzado en colaboración con el EPFL (el Instituto Federal Suizo de Tecnología de Lausana) a finales de 2011. Ese mismo año, Hublot adquirió la empresa suiza Profusion, especializada en la manufactura de componentes de fibra de carbono. Adicionalmente, un departamento propio de galvanoplastia realiza constantemente pruebas de nuevos tratamientos para el metal. En 2013, Hublot introdujo por primera vez en la industria relojera una cerámica de color rojo brillante.

En términos de marketing, la constancia y consistencia de Jean-Claude Biver son tan destacables como su necesidad de trastocar las ideas preconcebidas, tal como lo demuestra su estrategia: «Hay que ir allí donde se encuentran los clientes potenciales». Esta estrategia le convirtió en el primero en llevar una marca de lujo al mundo del fútbol. En 2008, Hublot se convirtió en «Cronometrador Oficial» de la Eurocopa de la UEFA. En otro hito histórico, en 2010 la marca se convirtió en «Reloj Oficial» y «Cronometrador Oficial» de la FIFA y la Copa del Mundo™, tras haber sido elegida como «Reloj Oficial» y «Cronometrador Oficial» de Ferrari. Dos golpes maestros que supusieron para Hublot una enorme visibilidad en el mercado mundial.

Jean-Claude Biver y Hublot han creado además un exclusivo club de amigos y embajadores que va más allá de los deportes, todos ellos leyendas en sus respectivos campos, y con quienes la marca colabora estrechamente en diversos proyectos benéficos: Usain Bolt, el hombre más rápido del planeta, el Bayern de Múnich, la Juventus de Turín, el Ajax de Ámsterdam y el Paris Saint-Germain, para nombrar solo algunos en el mundo del fútbol, así como la familia de Ayrton Senna con el Instituto Ayrton Senna, el prestigioso Museo Oceanográfico de Mónaco, presidido por S. A. S. el príncipe Alberto II de Mónaco, Dwyane Wade y el equipo campeón de la NBA Miami Heat, Kobe Bryant con Los Angeles Lakers de la NBA, Maria Riesch y Dario Cologna del mundo del esquí, o Depeche Mode y Jay Z en el ámbito musical. «La conexión surge al compartir. Al no compartir, perdemos. En Hublot hemos sido afortunados, y es nuestro deber compartir parte de ese éxito».

Con Jean-Claude Biver aún a la cabeza, Hublot es además la primera marca de lujo en lanzar un servicio de televisión en línea (Hublot TV), y que no cesa de explorar nuevas plataformas interactivas revolucionarias. Desde el punto de vista comercial, la red de boutiques exclusivas y distribuidores autorizados ha crecido desde 2007-2008 y cuenta actualmente con 750 puntos de venta y más de 70 boutiques exclusivas en algunos de los lugares más prestigiosos del mundo (Ginebra, la Place Vendôme de París, Madison Avenue en Nueva York, Miami, Beverly Hills, Las Vegas, Cannes, Saint Tropez, Londres, Berlín, Múnich, Moscú, Varsovia, Praga, Singapur, Shanghái, Pekín, Hong Kong, Ginza, Dubái, Abu Dabi, Kuala Lumpur, entre otras).

Anclada en el presente y en constante evolución, a la vanguardia de los nuevos avances en tecnología e investigación fundamental de nuevos materiales, Hublot mantiene su compromiso con los saberes tradicionales, creando relojes que llevan la marca de los relojeros de mayor talento. De este modo, la marca representa el Arte de la Fusión entre la cultura relojera y el desarrollo técnico de vanguardia, entre el pasado y el futuro… en palabras del Presidente de Hublot, Jean-Claude Biver: «no se trata de romper con el pasado, por el contrario, le rendimos tributo al conectarlo con el futuro».

Jean-Claude Biver fue designado Presidente de la División de Relojería del Grupo LVMH en enero de 2014, y supervisa las empresas TAG Heuer, Hublot y Zenith.

Información obtenida de : Hublot.com

Revisa más artículos interesantes aquí

Añadir comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.